Jueves, 26 diciembre 2019

La escoliosis en Santander. El mejor tratamiento

Los dolores de espalda son una de las dolencias más recurrentes que puede llegar a sentir cualquier persona a lo largo de su vida. En este sentido, la escoliosis se presenta como un tipo de dolor de espalda que puede generar en aquellos que la padecen un permanente malestar debido al desgaste de las vértebras.

Tal situación disminuye la tranquilidad y calidad de vida. Por ello, es necesario la intervención de un especialista para ponerle fin a esta dolencia.

Un método que ha demostrado ser muy útil para las personas que sufren escoliosis es el pilates que impartimos en nuestra clínica de fisioterapia de Santander.

Qué es y cuáles son sus causas

Los seres humanos tienen una pequeña desviación natural en la columna vertebral, pero cuando esa desviación es muy grande o anormal se dice que la persona sufre de escoliosis. Por su parte, las causas de escoliosis idiopática no siempre son claras y pueden variar según el tipo de escoliosis y de la persona que la padece. 

Síntomas y posibles complicaciones

Normalmente esta patología no presenta ningún síntoma, más allá de la propia desviación de la columna vertebral. Sin embargo, esta deformidad de la estructura ósea en ocasiones sí presenta síntomas y puede dificultar la calidad de vida del paciente ocasionándole: 

  • Dolores de espalda 
  • Diferencia en la altura de hombros y cadera 
  • Sensación de cansancio y pesadez en la espalda cuando están mucho rato de pie o sentados.
  • En los casos más graves, incluso se pueden presentar problemas respiratorios.

Tipos que se evidencian en Santander

Existen diferentes tipos de escoliosis y se clasifican respondiendo a distintos factores:

Según el tiempo de duración

Se divide a su vez en dos:

  • Estructural. La curvatura de la columna es permanente. Se produce por una enfermedad, una condición de nacimiento, un golpe o una infección. 
  • No estructural. La columna vertebral sufre una deformación temporal que puede ser corregida.

Según la edad del afectado

La escoliosis también se clasifica según el momento de su aparición:

  • Infantil. Se presenta en los niños de tres años o menos.
  • Juvenil. Se presenta en niños de cuatro a diez años.
  • Adolescente. Se presenta en adolescentes de once a dieciocho años.

Según la causa que la origina 

Neuromuscular. La deformación es ocasionada por una patología del sistema nervioso, como la poliomielitis, distrofia muscular o parálisis cerebral.

Congénita. El paciente nace con la patología, ya que las vértebras o costillas del bebé no se formaron correctamente.

Diagnóstico en Santander

Para diagnosticar si el paciente sufre escoliosis, el fisioterapeuta debe realizar varias pruebas físicas que determinan el grado de deformación de la columna vertebral. Una de las pruebas más comunes es el test de Adams, en tal caso, el médico comprueba que los hombros estén nivelados y el grado de inclinación de la pelvis. 

También se pueden realizar pruebas radiológicas que ayudan a comprobar la desviación. 

Dispositivos de inmovilización

En los casos de escoliosis moderada, el médico podría recomendar el uso de un dispositivo de inmovilización o corsé. Aunque esto no cura ni corrige la curvatura, suele evitar el avance de la deformación. 

La efectividad de uno de estos dispositivos aumenta con la cantidad de horas al día que el usuario lo lleva puesto. Quienes los usan, pueden continuar con la mayoría de sus actividades diarias y tienen pocas restricciones. 

Los dispositivos de inmovilización dejan de usarse una vez que los huesos dejan de crecer. 

Cirugía

El médico podría sugerir una cirugía para reducir la gravedad de la deformación de la columna y evitar que empeore. Dentro de estos procedimientos, la más frecuente se llama "fusión espinal". En esta cirugía el médico une dos o más vértebras para que no puedan moverse de forma independiente. 

Fisioterapia como tratamiento de la escoliosis 

La Fisioterapia ofrece varios tratamientos, que se pueden combinar con algún dispositivo de inmovilización. Veamos los más comunes:

  • Fisioterapia clásica. En este caso el terapeuta ofrece una serie de estiramientos y ejercicios que pretenden flexibilizar y fortalecer la columna vertebral del paciente.
  • Método Klapp. Se compone de una serie de posturas y de movimientos en cuadrupedia.
  • Reeducación Postural Global (RPG). Consiste en varias posturas de estiramiento globales. 
  • Inducción Miofascial. Es una combinación de presiones sostenidas en sitios específicos y estiramientos muy suaves.
  • Ejercicios en piscina. 
  • Natación Terapéutica.

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